miércoles, abril 21, 2004

the jesus & mary chain. just like honey

rica, joven, bella... y la inquietante relación con un guardia de seguridad


cuando te anuncian la muerte de alguien que acabas de ver poco tiempo atrás, no lo puedes creer, es difícil de asimilar.

Yo acababa de verlo caminar frente aquel edificio de gobierno, se veía radiante... ahora se encuentra really deeper underground

Tenerlo en mente me hizo recordarla. Cuanto llegue a quererla, a admirarla y como todo cambia de un segundo a otro. Nadie podía comparársele, ni siquiera podrían haberla imitado. Tenía esa especie de halo que diferencia a unos de otros, los que son de los que no son. delgada, cabello negro, piel blanca y siempre limpia, su risa, su postura. Cuando la conocí eramos muy jóvenes, quiero decir, realmente jovenes, cruzando la línea de la niñez para adentrarnos en algo que no conocíamos pero que sabíamos inevitable. Los recuerdos llegan como flashes, llenos de olores y sonidos capturados como muy pocos: los días en su casa, en medio de aquel bosque corrompido por fraccionamientos de lujo, las horas que pasaban mientras se escuchaba björk y new order y the jesus & mary chain. La cerveza y los pretzels, el cannabis y el vino blanco, su madre siempre ausente, su hermano que parecía no existir encerrado en aquella enorme y siempre obscura habitación. Muchos la criticaban, a mi no me importaba... pseudo hippie, intelectualoide, poser, y tantas otros adjetivos que intentaban colgarle pasaban de largo oliendo a envidia y podredumbre.

Tenía cientos de discos, algunos se los regalé yo, algunos otros los tengo yo en mi casa. Tenía cientos de libros y de zapatos y de ropa y de bolsas de polipapel de Zara, Armani, Nicole Fahri, D&G, Gap y todas esas firmas añejas y tiendas baratas que nunca pudieron mezclarse de mejor manera que en su guardaropa. Tenia estilo, tenía ese halo...

De vez en cuando ibamos/vamos a tomar café o a comer y platicabamos de lo que quería hacer como astrónoma, de que a veces se sentía muy sola y no podía dejar de llorar, de la santería y su devoción por ochun, de lo satanizada que se tenía a su religión, de que algun día quería ir a ver a su papa a Argentina de nuevo, que todo parecía tan perfecto que lo único que temía era que en cualquier momento se desplomara...

se desplomó

su padre murió y hacía años que ella no lo veía, tambien murió su hermano.

Tuve un sueño muy extraño: en el sueño mi madre y yo caminábamos por una calle cercana al departamento al atardecer, con el cielo púrpura sobre nosotros. Nos topábamos de pronto con un señor que era taxista o algo así y que por alguna razón mi madre conocía, y ella le preguntaba ¿Qué le paso?? ¿Qué le pasó?? Yo lo veía un poco golpeado pero no podía ver su cara, solo esacuchaba que él le decía que habia tenido un problema con un vecino suyo que era policía y que por subirle el volumen al radio había ido a golpearlo hasta su propia casa y que - ahí viene lo feo - con una cuchara le había sacado el ojo derecho, y que él había visto cómo el ojo de deshacía y mi madre solo movía la cabeza. Lo más inquietante era la tranquilidad con la que el hombre decía todo eso y que (es un sueño) cuando yo veía toda la secuencia de los hechos, el joven policia que clavaba la cuchara en la cuenca del ojo del anciano era un guardía de seguridad bastante sexy con el que tuve sexo un par de veces y que hace poco me tope de frente sin saber que hacer...

los sueños, los hechos, el pasado, el futuro: nada tiene una lógica que haga sentirnos seguros, que me haga sentir tranquilo en este momento.

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