¿ARRUINAR LA FIESTA? IDEAS FASCISTAS CON CONDIMENTO DE ANCHOAS Y SOPA DE TRES CEBOLLAS. RECUPERANDO LA CORDURA::::::

Ella sigue hablando sobre todo lo que ha comprado para la fiesta y lo mucho que le gustaría verme ahí, sentado muy quietecito sin dar la mala nota, sin ayudar a tener algo de qué hablar el domingo por la mañana. Yo solo sigo pensando en que ya ha pasado mucho tiempo de aquella explosión, de todo lo que me dejó sin recursos financieros, sin la EX persona más importante de mi vida, sin todas mis pertenencias, sin ganas de seguir dando batalla... Ella habla y tengo la sensación de que poco o nada le interesa si le estoy haciendo caso o si me interesa algo de lo que sale de su boca, es un monólogo ¿Sabes? Y ya me estoy adaptando a esta terapia gratuita que le brindo a todo aquel que se pase más de una hora conviviendo conmigo tres días a la semana. No me importa, yo sigo muy en mi papel, sin perder la compostura, recogiendo los pedazos y tratando de embonarlos lentamente, como un juego de damas o de-aquel-juego-de-tablero-que-tanto-le-gustaba-jugar. Avanzamos por una de las calles de la ciudad a bordo de su camioneta Mercedez, que en realidad no es una camioneta sino un híbrido entre camioneta y auto compacto al que fashionably han llamado klase A. A ella no le interesa nada de lo que yo tenga que contar, de lo que necesito, de que hay días que no tengo nada de dinero y hay días en los que me llega de golpe y lo gasto en costosas estupideces. El proyecto que tenemos en común sale a relucir un par de veces más por compromiso que por convicción y yo solo me río cuando me pregunta o me pide mi opinión sobre todo aquello que hemos acordado meses atras.

No se lo que esté apsando por su mente, ni por la mía.

Hacía mucho tiempo antes de este sábado 13 de septiembre que no tomaba de golpe más de una dosis de sedantes. El viernes, hurgando en los cajones encontré un blister lleno de lexotanes. No soy un junkie: solo recurro a las pastillas cuando el stress es demasiado o cuando tengo ganas de desconectarme un rato ¿frecuencia? unas dos veces a la semana.

Entramos a una tienda y pasamos de inmediato a la sección de revistas. Hojea la HOLA, aburrida, como esperando encontrar la felicidad en alguna de sus páginas. Hojea la Vanidades y la Cosmo... yo trato de concentrarme en las páginas de Blackbook y de la Spin que muy amablemente ella comprará minutos más tarde.

Pienso en lo que leí de Sartori: es un idiota, un anciano idiota y eurocentrista al que no se le debería dar ni la mitad del espacio y atención que le han estado dando en los últimos años los medios. Sartori da clases en Columbia que a su vez es la universidad donde pensaba hacer un posgrado él algun día.

él él él

Siempre termino destruyendo cualquier idea con la fétida presencia de ese fantasma del pasado que no logro desvanecer por completo.

en la noche una fiesta: salón elegante y miradas falsas que se refuerzan con conversaciones aburridas y por compromiso. Lo único bueno es la comida y la bebida: quiche de anchoas, sopa de tres cebollas, pato a la naranja y crema de avellanas con helado de menta. Mi outfit totalmente ZARA me parece patético pero no se puede pedir mucho cuando se vive de los restos de tu antiguo life style. La bebida tampoco estuvo mal: tequila centenario y absolut citron en cantidades industriales, mismas que no pude disfrutar como se debe dado que un día antes había disfrutado de los placeres químicos que me encontré dentro de un blister en un cajón de viejas pertenencias.

continúo con la búsqueda de la felicidad, si alguien se sabe un atajo hágamelo saber de inmediato, a veces creo darme por vencido.

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