La fiesta de Anja Schneider estuvo bien. Más gente que en los eventos normales de electro y demas nostalgia 80's. El colmillo, uno de mis favoritos: chico, acogedor, lúgubre, rápido acceso. Mucho freak, mucho guapo y bebidas by cuervo. Un día antes me pelee con fancyfreak, asi que el ambiente estaba tenso. Me caía gorda, en ese momento no podía ni verla... en realidad no fue para tanto pero drama queen que soy le dije cosas que, si no igual de hirientes, por lo menos la bajaron de su nube.

La música estaba muy alta, hacía calor y tuve que hacerle varias visitas a las edecanes guapas de cuervo que tenían frozen mix de cortesia (mi favorito el de uva, aunque el fresa piquin tenía lo suyo). A lo lejos escucho la voz de la amargada de mi madre "¿Qué te va a dejar todo eso?" Seguro más de lo que puedo esperar de ti...

¿Qué me deja?

Escapar por ratitos, de 11 a 4, en viernes o en sábado, olvidar todo por unas horas y pasarla bien. Fancyfreak estaba molesta, as usual, me valió madres y la dejé con el tummi y dí vuelta por el lugar. La gente siempre tiene miedo a interactuar, por lo general se agrupa en círculos pequeñitos y miran a los demas con miedo, con desdén. No falta quien sea amable, no falta quien se pierda...

Miss kitten, tiga, romina cohn, electro duro a todo lo que daba. Arriba mucha gente cuando Svadamenkraft comenzó a tocar. Las perras austriacas son vulgares y vienen a demostrarlo. Bailan mientras tocan tonadas simples, se fajan en el escenario, se desvisten y quedan en lencería nasty. Otras perras (estas mexicanas) se fajan (aunque yo no lo ví, me lo contaron ;) y dan hueva.

Anja comienza su set, bajamos y bailamos, aplaudimos, seguimos sus órdenes, nos comemos la jelly alcohólica que reparten los meseros (de nuevo mi favorita es la de uva/tequila) me como cuatro gelatinas alcohólicas, nos tomamos tres jarras colmillo, la noche se acaba y salimos a comer tacos.

De regreso, por bucareli muy lento, saco la cabeza por la ventana y respiro eso que se acaba y no llegará hasta la próxima semana...